El planeta regente de este incomprendido signo del Zodiaco, llamado Géminis es el mismísimo mensajero de los dioses, el inquieto Mercurio también conocido como Hermes entre los griegos.
El símbolo que representa a Géminis son los gemelos Castor y Pólux y es que los gemelos podrían llevarnos hacer la fácil asociación con la “doble” personalidad de Géminis. Aunque esto es una verdad a medias, ya que todos los signos mutables (que son aquellos que preparan el cambio para una nueva estación) también se conocen como signos duales y entre ellos está, no sólo Géminis, que es el más mutable de los mutables, sino también su pareja ideal, Sagitario, el inquieto Virgo y el sensible Piscis. Ninguno de ellos escapa a la “doble personalidad” que se le atribuye a estos signos.
Sin embargo, como no es falso que Aries es el más cardinal de los cardinales y Tauro el más fijo de los fijos, siendo signos que llevan en sí el peso más fuerte de la características del tipo de signo al que pertenecen (cardinal, fijo o mutable), Géminis es increíblemente voluble, esto quiere decir que cambia de idea más rápido de lo que tarda, por ejemplo, un Tauro en pestañear.
El carácter aéreo de Géminis
Si pensamos en el planeta regente de Géminis, Mercurio, una buena analogía es pensar en el mercurio o azogue, esa substancia inaprensible con la que están rellenos los termómetros, pongan una cantidad de mercurio sobre una superficie y verán la increíble volubilidad de este elemento, lo difícil que es “encasillarlo “ o meterlo en algún sitio y así comprenderán mejor el talante de Géminis.
Otra característica de los hijos de Mercurio es su encanto infantil, no por nada era el dios de los estafadores, los ladrones y los comerciantes (los sabios antiguos los ubicaban en el mismo grupo) y es que Géminis a punta de encanto y charlatanería puede venderle neveras a los esquimales.
Las mujeres y los hombres de este signo son terriblemente seductores y cuando son guapos lo son por partida doble. Por otra parte la leyenda de los gemelos (los dioscuros) refiere que uno era inmortal y el otro era mortal. Sin embargo, ambos eran muy fieles y unidos entre sí.
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Esto nos da parte, de la tensión interna de estos nativos. Otro elemento que se une para terminar de convertir a Géminis en un ser altamente fluctuante es el “aire” que es el elemento que lo rige y es que, traten de encasillar al aire y luego me cuentan.
Mercurio no era el mensajero de los dioses por casualidad. Los Géminis (como los Virgo) y todos los que tienen un Mercurio fuerte son reyes de la expresión verbal, pero además son inteligentes y con un gran sentido del humor. Una sonrisa casi perenne y una mirada que no se detiene nunca son buenos elementos para reconocer a un hijo de Mercurio, aparte claro, de su verbosidad y su capacidad de seducción.
La inteligencia, la extrema curiosidad y la capacidad de ser imprevisibles son consecuencias del elemento aire unido a la cualidad mutable y al planeta Mercurio. Por eso encontramos entre los geminianos a excelentes vendedores, oradores, políticos, charlatanes, y cualquiera que dependa de su capacidad de convencimiento para subsistir.
Publicistas y también deportistas de riesgo están entre los nativos de este signo, a los que aburre la estabilidad que emociona a un Tauro y cansa la sensibilidad que abruma a un Cáncer (los signos que están en los extremos opuestos de Géminis).
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Géminis en el amor
Es un signo que necesita mucha aventura, es por eso que su pareja ideal es el independiente y levemente egoísta Sagitario que puede mantener su atención gracias a una extrema independencia y a su carácter dual.
A un Géminis lo seduce la inteligencia y el sentido del humor, necesitan hablar para entenderse a si mismos y no son tan “físicos” por lo que en el amor necesitan estímulo mental, no aguantarían a alguien muy callado (a menos que sea para poder hablar ellos más) ni a alguien excesivamente dependiente (ya que necesitan mucho espacio).
Comunicación es la palabra clave de este signo y si su pareja no es hábil con las palabras o se deja engatusar fácilmente lleva las de perder con este signo de aire.