Un centauro y un león pueden ser una de las parejas más chispeantes, divertidas y aventureras de la rueda zodiacal. Leo con Sagitario significa unir el brillo solar y la intensidad de Leo al temperamento fascinante de los nativos de Júpiter, que inevitablemente genera una mezcla de lo más intensa y explosiva.
Leo es generoso, creativo, intuitivo y noble, Sagitario es generoso también, curioso y amante de la filosofía y los viajes. Ambos son de fuego, lo que les hace brillantes, temperamentales, creativos y muy amantes de la vida.
Tabla de contenidos
Leo con Sagitario en la amistad
Esta es una combinación amistosa bastante habitual. Ambas amigas despliegan un amor por la vida, un brillo y una intensidad que las hará habituales en todos los saraos, reuniones y actividades sociales, ya que ambas son muy curiosas y amantes de las nuevas experiencias.
La calidez, el entendimiento mudo y un excelente sentido del humor definirán esta relación amistosa, lo único que deberán trabajar dos amigas con esta configuración es, por una parte, el afán de dominio de Leo que suele ser un poquito imponente con sus ideas ya que es un signo fijo, por lo que está para enseñar y dirigir (es parte de su naturaleza) mientras que Sagitario es un signo regido por la amplitud de miras y la rebeldía propia de Júpiter,siendo además un signo mutable lo que quiere decir que es bastante difícil de dirigir como le gustaría a Leo.
Como ambas poseen en su temperamento la intensidad y calor del elemento fuego, no será raro que eso se manifieste en el carácter, a través de cíclicas explosiones de ira que deberán limar para que su relación no se resienta.
Leo con Sagitario en las relaciones de padres e hijos
Las Leo son unas madres entregadas y cariñosas, creativas y que gustan compartir con sus hijos y llenarlos de experiencias positivas. Los centauros cuando están pequeños poseen una curiosidad prácticamente insaciable por lo que serán muy felices guiados por el entusiasmo y la sabiduría de su progenitora Leo.
♥ Toma nota: Cómo son las personas del signo de Leo
Si es al revés, si la figura materna o paterna es Sagitario y los hijos son Leo, se produce un efecto similar, ya que los padres y madres sagitario suelen inculcar en sus hijos importantes valores humanos y filosóficos que los pequeños Leo asimilarán con esa sed de conocimientos y amor por la vida que los define. La empatía es natural y lo único que hay que vigilar en esta configuración es la necesidad de ambos de dominar, lo que puede generar choques de carácter pero que pasarán tan repentinamente como aparecen.
Leo con Sagitario en el trabajo y los negocios
Esta es una unión excelente para todo tipo de sociedades, ya que ambos signos despliegan un entusiasmo y una creatividad notables capaces de poner a andar cualquier empresa por muy difícil que ésta se plantee.
Leo es un excelente creativo, que además posee toda la fuerza para sacar cualquier empresa adelante y su socio Sagitario posee una amplitud de miras y un enorme talento para comunicar sus ideas tanto apropios como a ajenos, por lo que es casi imposible que una empresa guiada por dos socios tan entusiastas y vitales genere otra cosa que ganancias y satisfacciones.
♥ Toma nota: Cómo son las personas del signo de Sagitario
Leo con Sagitario en el amor
Esta es una unión que inevitablemente genera chispas desde el primer momento. La configuración 5-9 segun la astróloga Linda Goodman es una mezcla que genera una empatía y un entendimiento sentimental casi inmediato.
La afinidad que tienen ambos signos en su forma apasionada y romántica de expresar el amor, garantiza una unión intensa, sexual y llena de sorpresas que los hará sentirse extasiados y felices de haberse encontrado. Compartirán el gusto por los deportes, los placeres y las satisfacciones de la vida.
La curiosidad y el amor por vivir que los define los llevaran a hacer numerosos viajes y es posible que su circulo de amigos sea abundante. De nuevo lo único que hay que temer es que las llamas de ambos signos de fuego se eleven demasiado alto y puedan quemar a su alrededor. Esto se traduce en que ambos deben moderar el carácter y poner siempre el respeto en primer lugar en vuestra relación para evitar que una unión tan hermosa, pueda ser lastimada por palabras o hechos producto de la irreflexión o de la ira.