Cada uno de nosotros contamos con una personalidad que está vinculada a un número. Cabe destacar que en un artículo publicado previamente aprendimos a calcular el número del alma a través de las letras de nuestro nombre y también según los números que conforman nuestra fecha de nacimiento. Ya sabemos que al tomar una fecha como por ejemplo el 3 de octubre de 1972 deberemos reducir los distintos números que la integran a un sólo dígito del uno al nueve a menos que el resultado sea 11, 22 o 33 que son considerados números ‘maestros’ por lo que no se reducen.
Asimismo, los números 13, 14, 17 y 19 son considerados números kármicos, lo que tiene que ver con un uso o abuso del karma que viene de vidas anteriores. Estos números también se reducen(13 es 1+3= 4) y que su karma estará relacionado con las características del número obtenido de esa reducción.
Personalidad según número
- El uno: individualistas, atrevidos dinámicos y creativos. Los números uno se identifican bastante con el arcano número uno del tarot, el mago. Son personas que destacan por su originalidad e inventiva y por su falta de temor a probar las vías más creativas. Necesitan independencia y les cuesta mucho ser dominados por otras personas.
- El dos: Los número dos necesitan colaborar y obtener colaboración de los demás para sentirse realizados. Son diplomáticos, adaptables y conciliadores muy sensibles y colaboradores. Deben cuidarse de ser excesivamente sumisos o acomodaticios porque su necesidad de aprobación a veces puede comprometer su independencia.
- El tres: Alegres, optimistas, sociables y creativos los tres se destacan por su necesidad de innovar y su alegría de vivir. Curiosos, ambiciosos y enérgicos, los números tres destacan por su inagotable fertilidad creativa y por sus muchos talentos artísticos. Deben evitar dispersarse y cultivar la paciencia y la perseverancia.
- El cuatro: es el número del cuadrado, de la estabilidad, de la seguridad, características que definen muy bien a estas personas que se destacan por ser muy fiables y responsables, así como meticulosas y detallistas. Un número cuatro es el empleado ideal por su practicidad y responsabilidad inquebrantables. Con todas estas cualidades debe evitar volverse extremadamente materialista y cuadriculado porque tienen gran propensión a pasar del orden extremo a la obsesión.
- El cinco: los cinco son los viajeros, los filósofos, los místicos. La definición de las características de este número tiene mucho que ver con su carta en el tarot, El Sumo Sacerdote, ya que representa personas guiadas por un ideal que saben transmitir a los demás. Son versátiles, inteligentes idealistas, pero también inquietos adaptables y curiosos. Deben cuidarse de ser excesivamente curiosos o de caer en adicciones o en libertinaje.
- El seis: Simpáticos, generosos, honestos y dedicados, los números seis son personas abocadas al amor familiar y a desarrollar un impulso protector por sus semejantes, ya que se sienten muy responsables por los demás. Deben evitar sobrecargarse de responsabilidades y no intentar abarcar más de lo que pueden.
- El siete: observadores, místicos, espirituales y con un gran poder psíquico los siete son introvertidos, observadores e intelectuales. Deben cuidarse de volverse excesivamente abstraídos y solitarios ya que tienen una tendencia natural a retraerse.
- El ocho: dominantes, líderes por naturaleza, seguros de si mismos y emprendedores. Los ocho son personas que generan cambios en su entorno por su competitividad y afán de superación. Son personas equilibradas y perseverantes, pero deben aprender tolerancia y humildad porque a veces pecan de arrogancia.
- El nueve: Idealistas, caritativos y bondadosos los números nueve son personas valientes, intuitivas y muy sensibles pero que a veces pecan de excesiva ingenuidad o de un exceso de abnegación que va contra sus propios intereses. Deben aprender a ser un poco más egoístas sabiendo que no se puede dar lo que no se tiene en un principio.