Últimamente los descubrimientos y, sobre todo, la curación de enfermedades que se están consiguiendo gracias al estudio del árbol genealógico, nos abre nuevamente el paradigma de que todo en este Universo está unido inexorablemente y que los lazos con nuestros antepasados permanecen “actualizados” a través de las generaciones.
La familia no es simplemente un concepto que nos una y nos vincule afectiva y genéticamente a otros seres humanos, es más que eso. Es un contrato dónde nos hacemos cargo de las deudas pendientes y que seguirá vigente después de nuestra muerte, depositando asimismo dichos legados en nuestros descendientes, si estos aún permanecen sin resolver.
Según Alejandro Jodorowsky, (uno de tantos precursores en el estudio psicogenealógico del árbol familiar), somos los depositarios de las tres generaciones que nos preceden, lo que hace un grupo considerablemente nutrido de personas, cuyas vivencias pueden estar influyéndonos actualmente. Desde dicha perspectiva, los secretos familiares que han sido guardados en una generación, representan para las generaciones venideras, una fuente perjudicial que envenena sin remedio con traumas y conflictos insanos su vida.
¿Por qué se originan los secretos familiares?
- Los secretos ocurren dentro de un clan familiar porque se evidencia una necesidad imperante, por parte del miembro que la ejecuta, de ocultar la verdad por miedo, vergüenza o por cualquier emoción intensa difícil de digerir y de asimilar. Los secretos que van guardándose por años, (y ya no decimos por generaciones enteras), se van transformando en un dolor sordo que se va enquistando en las ramas, llegando a contaminar en ocasiones a todo el árbol.
“El mundo familiar es mucho más expresivo de sentimiento negativos, en comparación con personas más distantes, como tu jefe, por ejemplo. Esto ocurre porque la familia es un contenedor de emociones intensas y donde más mostramos lo que sentimos” Karin Fouchs, psicóloga
- El clan familiar se convierte, con el pasar de las generaciones, en una especie de volcán con vida propia a punto de explosionar, dónde son guardados en su interior mucha información y alguna en forma de secretos familiares, tras los que se intentan ocultar todo tipo de humillaciones, deshonras, vejaciones, abusos, todo tipo de temas tabúes, infamias, vergüenzas, etc, que se silencian de por vida. El estudio genealógico indica que todo esto, (que es ocultado por la razón que fuese en forma de secretos), se manifestará tarde o temprano en el cuerpo físico de aquellos “herederos” de generaciones posteriores, encargados de dar luz a estos secretos, con el único propósito de que el árbol sea saneado y que se talen esas ramas que se encuentran corrompidas y que mantienen al clan familiar enfermo.
- Lo curioso y paradójico es que normalmente sucede que los secretos familiares se originan precisamente por una falsa idea de proteger y resguardar la estabilidad del clan familiar, y de esta manera inocente de proceder, creer que si ocultamos la verdad, no existirán ni daño ni sufrimiento, evitando a toda costa el dolor familiar. Sin embargo, cuando dichos secretos se van a la tumba y no consigue la verdad salir a flote, es entonces cuando se guarda la semilla de este secreto en el inconsciente colectivo del clan familiar, el cuál germinará como mínimo antes de la tercera generación venidera, en forma de malestares y dolencias. Y esto es lo que se conoce a grandes rasgos por psicogenealogía.
La importancia de expresar las emociones
- Los secretos familiares llevan la carga emocional de quién los generó. Y esta impronta emocional es la que se codifica en nuestro material genético, revelando inevitablemente su identidad. Cómo decía el gran maestro del psicoanálisis, Sigmud Freud:
“Aquel cuyos labios callan, conversa con la punta de los dedos. Se traiciona por todos los poros”
- La magnitud de la enfermedad es proporcionalmente equivalente a la del secreto que lo ha provocado. El árbol se encarga de sacar su secreto a la luz, creando ciertas estructuras repetitivas, pretendiendo de esta manera llamar la atención. Cuando el secreto se manifiesta en el cuerpo del heredero, normalmente el propio cuerpo lo siente como un agente extraño que no le pertenece y así lo hace saber. Es por esto que la raíz de tantos tumores y cáncer están saliendo a la luz hoy día. La psicogenealogía defiende que uno de los orígenes de esta enfermedad tan extendida actualmente podría ser la respuesta sorda a esos secretos familiares guardados generaciones atrás.
- Es importante expresar siempre todas las emociones. Más allá de la dimensión de los daños que puedan ser causados por los secretos familiares, cada vez son más los expertos, psicólogos y terapeutas que tienen claro que expresar las emociones (ya sean verbalmente, o a través de cualquier tipo de expresión física corporal o artísticamente) es fundamental para la salud general de la persona. Cuando reprimimos una emoción, el cuerpo se encarga de expresarla sino le damos salida. Pero cuando esta emoción cobra una intensidad tal que ni el propio cuerpo es capaz de manifestar cuando es reprimida, entonces «decide» instalarse en el programa genético familiar.