En algún momento de nuestra vida, sin importar la edad, nos hemos sentido traicionados o decepcionados, sin importar cual ha sido el motivo es importante aprender a perdonar, porque sólo de esta forma nos sentiremos más felices con nosotros mismos. En un primer momento sería imposible, ya que cuando nos sentimos traicionamos el dolor, la rabia y el rechazo invade nuestro cuerpo, pero cuando el tiempo transcurre las cosas se van observando desde otra perspectiva.
Así es que tanto aprender a perdonar como ofrecer una disculpa a alguien es muy difícil. El rencor se queda durante un largo tiempo dentro de nosotros y se refleja en nuestras emociones. Mantener esa sensación dentro de nosotros crea algo insano que provoca sin quererlo una transformación en nuestra personalidad.
Resulta muy fácil decir que debemos perdonar, pero muy complejo tomar esta decisión cuando alguien nos has causado un profundo daño, ya sea emocional o moral. Muchas veces utilizamos expresiones como ‘nunca lo podré perdonar, ni siquiera en otra vida’ y mientras pronunciamos estas palabras guardamos dentro un gran rencor, que con el tiempo te das cuenta que no lleva a ningún lado. Aprender a perdonar supone obtener una paz mental que no teníamos hasta el momento y olvidar todo el pasado. Cuando perdonamos no quiere decir que aceptamos todo lo que nos suceda, sino que decidimos dejar algo que nos molesta a un lado. Probablemente esa persona que no ha hecho daño no vuelva a entra en nuestra vida, ni tendremos contacto con ella, pero si aprendemos a perdona olvidaremos antes esa mala y desagradable experiencia.
Lo que está claro es que mientras nos quedemos en el pasado, no habrá forma de avanzar si la mente está llena de pensamientos negativos, odio, recuerdos y heridas sin cicatrizar. Si perdonamos, menos culpable nos sentiremos y experimentaremos un estado de bienestar emocional pleno. No se debe mover el pasado, aunque así se desee, ya que los errores no se pueden cambiar pero si las enseñanzas positivas que debemos obtener de dichos errores. Es mejor pensar en el presente y en el mañana que quedarse en el pasado, porque de esta forma se paralizará nuestra vida. El lado positivo de todo ello es que aún tras haber pasado por momentos complicados tenemos la capacidad de continuar y guiar nuestra vida.
Claves para aprender a perdonar
- Empatía. Gracias a la empatía nos podemos poner en el lugar de la otra persona. Y así poder encontrar razones y motivos para su conducta.
- Comprensión: Esto no quiere decir que se justifique el comportamiento de otra persona, sino que no hay que aferrarse al rencor y el orgullo.
- Generosidad: De esta forma se deja atrás a la venganza, el rencor y el odio. Y así de esta manera nos sentiremos mejor.
- Humildad: La humildad es una parte esencial en todos los ámbitos de la vida y en este sentido es importante para conseguir la paz y tranquilidad.
Es importante analizarnos a nosotros mismos, reflexionar y tratar de ser objetivos, aunque sea complicado. También hay que observar nuestras reacciones, pero sin llegar a juzgarlas, porque se verá afectada nuestra autoestima. De cada hecho, se obtiene una enseñanza que es importante para saber aplicarla en un futuro.