Cada signo del Zodíaco tiene cierta fama de ser o un pequeño demonio o un angelito confeso.
Pero no todo es cierto, ya que vivimos en un mundo dual dónde conviven tanto el bien como el mal por igual.
Ambos lados forman parte de una misma balanza, y habitan en nuestro interior. Los hay que son ángeles nada más nacer, mientras que otros pueden llegar a convertirse en auténticos demonios si han elegido alimentar más esa parte oscura que habita en ellos.
Ambos lados se encuentran dentro de nosotros para ayudarnos a conocer un poco mejor qué se esconde en nuestro interior.
Es importante distinguir a primera vista ese ángel o demonio que nos viene de cara. ¿En qué lado de la balanza crees que estará tu signo? Descúbrelo a continuación .
Aries es un demonio en toda regla, sobre todo cuando le hacen daño. Disfruta de la intensidad del momento y del fuego cuando la situación se pone calentita y cuando se enfada parece que saca lo peor de si mismo. Este signo es muy radical, mucho cuidado con llevarle la contraria, puede ser terrible.
El signo de Tauro resulta ser un ángel sin alas para sus seres queridos. Llega a este mundo para hacer lo mejor que sabe y está dispuesto a ofrecer a los que se encuentran a su alrededor, una manera de disfrutar de los placeres de la vida. Merece la pena tenerlo cerca.
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Géminis es un demonio nocturno. Cuando sale de fiesta se le puede ver mejor la cola de demonio que esconde entre sus mejores galas. Le gusta demasiado jugar con las personas y disfruta riéndose de los más débiles.
El signo de Cáncer es un angelito con carita de pan que conquista la mayoría de los corazones . En ocasiones, una víctima en potencia que disfruta sintiéndose el ser más desafortunado de la tierra. Pocas cosas le hacen reaccionar con maldad.
Leo es una persona que puede llegar a dar miedo cuando saca su mal humor , y que, aunque le cueste admitirlo, le gusta portarse mal de vez en cuando, pero sólo por diversión. Es mejor estar preparado frente a sus reacciones desmesuradas.
El signo de Virgo puede ser un demonio muy intransigente con aquellos que no bailan a su ritmo. Su lengua afilada suele emitir más de una crítica negativa sin sentido. Le gusta decir lo que piensa, aunque a veces puede pasarse de frenada.
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Libra puede ser ángel o demonio dependiendo en todo momento de cómo se sienta. Es una persona que se rige por esta balanza interna del bien y el mal, por lo que si encuentra a alguien en su camino que tiene méritos para hacer el mal, será el peor de los demonios con él.
El signo de Escorpio es un pequeño demonio, no quiere serlo, pero le obligan a serlo la mayoría de las veces. La fama de diablo le precede, simplemente por el simple hecho de ser directo y honesto hasta la médula, cae en el saco de las personas malignas.
Sagitario suele tener carita de ángel y es una de esas personas que sin saber por qué siempre suele caer bien . Pero también suele usar sus alas para emprender el vuelo y desaparecer. Cuando se tiene a este signo cerca es empezar a reír sin saber por qué.
Capricornio es un ángel que ha venido a este mundo para intentar cambiarlo a base de esfuerzo. Le gusta ser perfeccionista y siempre juega a ser el mejor. Hacer el bien es uno de sus objetivos y le encantará ser el número 1 en bondad.
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El signo de Acuario simplemente es un demonio travieso y juguetón , que a veces no le gusta relacionarse con todo el mundo. Lleva siempre un as en la manga por si tiene que sacarlo para que le hagan caso. Cuando quiere, puede ser maquiavélico.
Piscis es un ángel caído . Siempre suele compadecerse de todo el mundo, incluido él mismo. La bondad que demuestra y el altruismo lo llevan a ser una persona tan sensible que puede ganarse las alas antes de cumplir la mayoría de edad.
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