Un orgón es un objeto, muchas veces muy hermoso, que se crea y se construye, cuya función es transformar la energía del ambiente, por tanto, es un transformador de energía, así como un estabilizador y un filtro.
Podríamos decir que es un amuleto que nos protege. Nos ayuda a que el campo electromagnético que nos rodea, así como todo aquel espacio que esté vinculado a nosotros o en su presencia, esté en armonía. El orgón podemos confeccionarlo nosotros mismos o se puede comprar cada vez en más lugares.
¿Para qué se usa el orgón?
La utilidad del orgón deriva en el poder que tiene de transformar todos los estímulos densos o negativos que recibimos, en algo positivo. Principalmente, con las energías que emiten los aparatos eléctricos, los móviles y las antenas. Nos protege también de las emisiones perjudiciales que, consciente o inconscientemente, nos transmiten otras personas sobre nuestro campo de energía.
El orgón purifica también el agua que consumimos y ayuda a hacer crecer las plantas. Colabora con el estrés, con el insomnio y el resto de las manifestaciones que tiene nuestro cuerpo, a consecuencia de los desequilibrios energéticos que se generan en esta sumatoria de experiencias que es la vida. No se limpian y tampoco se recargan. Actúan por sí mismos.
¿De qué está hecho el orgón?
Un orgón está compuesto generalmente de una resina orgánica, un cuarzo, virutas de metal y una espiral de cobre. Todas estas piezas, por sus propiedades intrínsecas y su forma de relacionarlas generan que estos objetos estabilicen los desequilibrios.
En la década de los años 30 y los años 40, el Dr. Wilhem Reich (que fue discípulo de Freud) fue capaz de detectar y medir por vez primera la existencia de una energía, que ahora denominamos éter, a la luz de los nuevos descubrimientos científicos. El Dr. Reich denominó a esta energía orgón y para detectarla utilizó un contador Geiger modificado especialmente.
De esta manera se percató en sus experimentos que, alternando diferentes capas de fibra de vidrio, que es orgánica, y fibras metálicas inorgánicas se creaba un campo etérico medible de considerables dimensiones, comprobando que estos campos influían muy positivamente en la salud física y psicológica de aquellas personas que entraban en ellos.
¿Y tú, a qué esperas para confeccionar o tener tu propio orgón?