Los rituales son una tecnología humana, que muchas culturas indígenas continúan practicando, pero no están reservadas únicamente a tradiciones indígenas o a movimientos religiosos. Los rituales son un legado humano y son así mismo técnicas por medio de las cuales las comunidades realizan actos que tienen un impacto benéfico en el alma de los individuos.
Los rituales son en sí actos con los cuales el individuo profundiza en los aspectos importantes de su vida, fortalece y sana los vínculos con su familia y el prójimo, e incluso con generaciones pasadas y venideras, así como también dan la posibilidad de sentir pertenencia a la comunidad, a lo humano, a la naturaleza y a lo sagrado, como quiera que el individuo considere y respete lo sagrado.
¿En qué consisten los rituales?
La técnica ritual consiste en el arte de hacer, de llevar a cabo algo, no son un discurso o un mero saber. En el mismo sentido, la música es un hacer, porque no se disfruta ni se comprende, si no que se lleva a cabo y se vive.
Existen tantos tipos de rituales como comunidades actuales. No está escrito cómo deban ser, en muchos lugares y tradiciones se transmiten oralmente y en ese sentido son una práctica que en su movimiento, a través de las generaciones, se renueva, aún cuando lo esencial permanece.
Los rituales, llevados a cabo con una comunidad respetuosa, honesta y con humildad, ofrecen la posibilidad de sentir la fuerza de un grupo de personas que se junta con intereses similares, ya sea sanación, petición, bendición, reconciliación, unión, agradecimiento, o incluso celebración.
En este sentido estos rituales no obedecen a ninguna escuela o tradición religiosa, no siguen ningún dogma estricto ni mucho menos a movimientos sectarios y excluyentes. Los rituales, bajo esta perspectiva, si bien están inspirados por tradiciones de diversos lugares del mundo, mantienen un principio de profundo respeto por las muy diferentes religiones actuales.
No están en contra de las religiones y tampoco son una religión establecida. Son actos simbólicos que manifiestan una actitud ante la vida y ante lo humano, ante la naturaleza y el mundo y finalmente ante los movimientos del alma y el espíritu.