Conversar puede ser una bendición o poco menos que una condena. Todo depende del tema de conversación que plantees.
El problema es que muchas veces nos quedamos callados soportando el típico silencio incómodo . En ese momento las ideas desaparecen y suele ser difícil encontrar un tema de conversación.
¿Qué técnicas puedes utilizar para sacar temas de conversación interesantes y conectar mejor con los demás?
La escucha activa es una habilidad esencial para sacar un buen tema de conversación.
Al escuchar a la otra persona con atención, conocerás sus intereses y podrás continuar con preguntas y nuevos temas sin mayores problemas.
Una vez sea tu turno, plantea preguntas relacionadas con lo que la otra persona está diciendo. Si aún no ha dicho nada, muestra interés en ella .
La escucha activa te dará oportunidades para sacar temas de conversación interesantes.
Aquí la idea es hacer preguntas abiertas que no pueden ser respondidas con un sí o un no , sino que requieren de una respuesta más elaborada.
Este es uno de los mayores errores que suelen cometerse a la hora de sacar tema de conversación.
Por ejemplo, en lugar de preguntar «¿Te gusta el fútbol?», pregunta «¿Qué te parece el fútbol?». Al hacer preguntas abiertas, das a la otra persona la oportunidad de hablar más sobre un tema y puedes encontrar nuevos temas de conversación en torno a eso.
Aquí te ayudará pensar previamente en temas más originales que el fútbol. Algunas ideas que pueden funcionar:
Deporte (en general). Lectura. Juegos de mesa. Cine, series o teatro. Cocina. Intenta ser general, si preguntas algo como “¿Qué te parece la lucha grecorromana?”, lo más probable es que recibas una gran carcajada pero no un buen tema de conversación.
Las noticias de actualidad son otro posible buen tema de conversación, ya que son relevantes para casi todas las personas .
Y no hace falta que busques una noticia de última hora. Mejor utiliza temas de los que casi todo el mundo habla en las últimas semanas, probablemente funcionen.
También puedes hablar sobre eventos actuales en tu ciudad. Incluso puedes usar situaciones más genéricas:
“Vaya cómo está el tema de los precios, ¿eh?”
Dependiendo de la persona que tengas delante, puedes sacar un tema de conversación de actualidad más genérico, como la crisis o alza en los precios. A priori no son temas apasionantes, pero pueden servir para romper el hielo. Y quién sabe, quizá den lugar a conversaciones interesantes que vayan más allá de lo típico.
Otra excelente forma de sacar tema de conversación es buscar puntos en común con la otra persona.
Esto puede incluir desde intereses, pasatiempos o lugares de origen hasta experiencias de vida. Al encontrar puntos en común será mucho más fácil tener una conversación interesante .
Si descubres que a la otra parte le gusta el deporte, saca tema de conversación por ahí. Si te dice que le gusta la lectura, haz preguntas abiertas relacionadas con las novelas.
Solo tienes que evitar hacer preguntas cerradas que puedan ser respondidas con un sí o no rotundo.
En vez de optar por las preguntas, también puedes contar historias.
Esto no consiste en ser el típico “chapas” que va por ahí dando la brasa a todo el que se encuentra. Consiste en dedicar unos minutos a contar una anécdota curiosa o una historia divertida que te haya pasado.
A partir de historias curiosas suelen surgir conversaciones de lo más interesante. Esta técnica suele funcionar mejor porque la gente tiende a relajarse más así que escuchando una batería de preguntas.
Aquí lo más importante es respetar tu turno y ser breve con la historia, en poco tiempo sabrás si puede dar pie a interesantes conversaciones o no.
Como has podido leer, sacar temas de conversación suele ser todo un desafío. Mucha gente se siente incómoda por ello. Con estos tips lo tendrás un poco más fácil. Recuerda mantenerte abierto a nuevas ideas y escuchar con atención al resto.
