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Científicos e investigadores norteamericanos están, desde hace años, desarrollando un complejo sistema para descifrar los procesos mentales durante el sueño.
«Nos gustaría leer los sueños de la gente» – ha asegurado el científico Dr. Moran Cerf. Y, precisamente, lo quieren hacer mediante un dispositivo capaz de registrar la actividad cerebral de nivel superior. El objetivo principal del proyecto del Dr. Cerf es desarrollar un sistema que permita visualizar electrónicamente los sueños a través de las neuronas del cerebro, ya que el estudio ha permitido averiguar que, la actividad de las mismas, se asocia con objetos o conceptos específicos. Por ejemplo, Cerf descubrió que cuando uno de sus voluntarios del proyecto, al que se le instalaban unos electrodos en la cabeza, pensaba en alguien famoso como Marilyn Monroe, una cierta neurona se activaba. Así se fue realizando el proyecto, mostrando a un grupo de voluntarios una serie de imágenes a las que reaccionaban a nivel neuronal de cierta manera. De esta forma, la investigación ha conseguido identificar una vasta lista de objetos y conceptos al respecto. Dicho listado se ha convertido en una base de datos referencial para cada paciente.
Aunque hay todavía un largo camino por recorrer antes de que esta simple observación se pueda traducir en un ciento por ciento de fiabilidad, lo cierto es que la investigación va por buen camino. La siguiente etapa consiste en vigilar la actividad cerebral de los voluntarios cuando estén durmiendo. Los investigadores solo serán capaces de identificar los conceptos que se relacionen con la base de datos almacenados hasta ahora, pero dicha base se puede aumentar, por ejemplo, mediante el control de la actividad neuronal ante el visionado de una película. Esta sería la analogía más cercana a la experiencia del sueño entendido como una especie de cine onírico.
A nivel tecnológico, sin duda, resulta un gran avance, el poder traducir nuestros pensamientos en imágenes, pero el futuro de este proyecto se mantiene aún en la incertidumbre, aunque cierto es que la ciencia y la tecnología humana están cada vez más cerca del sueño, de hacer realidad nuestros sueños, convirtiéndolos en una especie de documental onírico, abriéndose la puerta del inconsciente, dónde tantos y tantos archivos ocultos se esconden a nuestro intelecto. Quizás la ciencia tenga la respuesta definitiva a las preguntas más profundas de la psique humana y para entender la realidad piscosimbólica y metafísica de los sueños, levantando de su tumba a Freud y a Jung, quienes indudablemente estarían encantados de un descubrimiento científico de tal magnitud.
