¿Te suena de algo la palabra Xenoglosia? Se trata de un fenómeno que muchos parapsicólogos han definido como la capacidad de una persona de hablar fluidamente y escribir en un idioma diferente al suyo, sin tener nociones de él ni tampoco estudios previos, y siendo incluso, una lengua totalmente desconocida para esta persona hasta el momento en que comienza a hablarla de forma espontánea como si tal cosa.
Hay que resaltar que no sucede bajo circunstancias normales, es decir, suele producirse bajo los efectos de determinadas situaciones como cuando la persona está inducida por otra bajo hipnosis, o entra en estado de trance, o tras un suceso postraumático, como salir de un coma.
Y es que al parecer son bastantes los casos que se conocen de personas con Xenoglosia, por lo que no es un fenómeno aislado, siendo documentada desde la antigüedad en muchos textos, encontrándola por ejemplo en varios pasajes de la Biblia dónde ha quedado registrado este curioso suceso. Como con las siguientes palabras del apóstol San Pablo afirmando que: “el Espíritu Santo da a quién quiere la facultad de hacer profecías, la razón de interpretar las palabras y el don innato de hablar diferentes lenguas de manera espontánea”.
¿Es la Xenoglosia un fenómeno sobrenatural?
A día de hoy, los argumentos que expliquen casos como el de la Xenoglosia aún no son claros ni tampoco determinantes, siendo asociada a diferentes experiencias sobrenaturales o a talentos innatos como la telepatía. Entre estas experiencias paranormales cabe destacar el posible contacto con espíritus, posesiones demoníacas, experiencias místicas de tipo milagroso divino, trastornos y delirios psicóticos como la personalidad múltiple, o la reencarnación y regresión espontánea a vidas pasadas.
Uno de los aspectos que hacen de la Xenoglosia un fenómeno realmente sorprendente es que se han descubierto casos en que las personas llegan hablar lenguas antiguas y “muertas” como el sánscrito o el latín, o casi olvidadas como la atlante, y hasta prácticamente desconocidas porque provienen de fuera del planeta Tierra y tienen origen cósmico.
Se han diferenciado dos tipos de Xenoglosia. Por un lado está la “recitativa” con la que la persona habla el idioma o palabras sueltas en otra lengua con naturalidad, pero que no entiende ni jota de lo que está articulando ni tampoco puede mantener una conversación. Y luego está la “sensitiva o consciente”, dónde la persona sí sabe lo que está diciendo y puede llevar a cabo con fluidez una conversación en un idioma desconocido para ella hasta entonces.
Antiguamente muchos calificaron la Xenoglosía como un fenómeno paranormal que tenía que ver con un “estado de posesión”, es decir, cuando otra entidad (espíritu) suplanta la identidad de la persona y le otorga por tanto, todos los conocimientos que ésta posee, inclusive hablar su idioma.
Esta idea era algo común en la Edad Media, por ejemplo, dónde cualquier fenómeno extraño era asociado al mismísimo Satanás y así la Xenoglosía sólo conformaba un resultado más de sufrir una posesión demoníaca y que la única solución era que la persona debía ser exorcizada o mandada a la hoguera por brujería.
Actualmente son más los que se decantan por la idea de que la Xenoglosia se engloba dentro de la temática de la reencarnación y vidas pasadas, siendo esta explicación la más extendida y aceptada. Sea como sea, resulta un fenómeno fascinante porque además se han documentado tantos casos, que no deja de llamar la atención y porque sólo algo tan inexplicable como los fenómenos paranormales hacen posible que nos preguntemos y nos planteemos nuevos paradigmas de la propia existencia humana.
Xenoglosia, el idioma del alma
Cuando se habla sobre vidas pasadas y la Reencarnación muchos son los que ponen el grito en el cielo. Pero ¿qué otra explicación más acertada que ésta, podría explicar fenómenos tan peculiares como el de la Xenoglosia?
La evolución del Psicoanálisis y el desarrollo de técnicas como la hipnosis han hecho posible profundizar e indagar más acerca de las vidas pasadas y la reencarnación del alma, y en parte también gracias al reconocimiento y curiosidad popular generados, por ejemplo, con best seller como los escritos por el Dr Brian Weiss. De esta manera, estos temas cada vez más son tratados con mayor normalidad y con menos escepticismo.
Aunque a ojos de la ciencia todos estos datos suelen ser tomados sin la rigurosa seriedad que se merecen y prefieren seguir aventurándose, proponiendo otras explicaciones más lógicas y científicas que den sentido a fenómenos como la Xenoglosia. Así por ejemplo, los científicos dicen que este fenómeno tiene que ver más bien con la memoria genética o con el aprendizaje inconsciente que se registra a nivel neuronal.