Las Nieblas de Avalon, englobada dentro del género de la fantasía mitológica, fue escrita por la norteamericana Marion Zimmer Bradley y constituye un viaje a las leyendas artúricas, mezclado con el dulce sabor del romance que recuerda curiosamente a los personajes de Corin Tellado. Eso sí, mucho más liberados sexual e intelectualmente, deambulando por un paisaje de castillos, reinos encantados en medio de una laguna o castillos que se alzan en los antiguos y enormes acantilados de una Britania antigua y misteriosa.
También hay que decir, a favor de esta obra de ficción que sacerdotisas, damas del Lago como Viviana y misteriosas «hadas» de Avalon como la ambigua Morgana o la más amenazante que terrible Morgausse, son las que llevan la absoluta voz cantante, en esta saga de novelas ambientadas en Los Reinos Antiguos y las islas mágicas previas a que Arturo, el famoso Rey de Britannia llevara la paz a su reino.
Esta obra de Marion Zimmer Bradley proporciona una manera cercana y romántica para conocer a algunos de los personajes claves de la mitología artúrica, entendiendo claro que la autora se permite grandes libertades en cuanto a algunos nexos y motivaciones entre los personajes, así como de las situaciones que viven.
Por ejemplo, en las historias más célebres sobre Lanzarote y Ginebra se dice que se conocieron cuando Arturo mandó a Lanzarote a buscarla y se enamoraron por el camino. Pero para Zimmer Bradley se enamoran mucho antes, cuando Lanzarote está con su prima Morgana, ya que en la saga de Zimmer Bradley, Lanzarote era hijo de Viviane la Dama del lago, mientras que en las leyendas artúricas tradicionales Lanzarote es secuestrado por ésta y criado por ella (por eso de llama Lanzarote del lago). Este tipo de libertades con todos los personajes se los permite pero sin traicionar excesivamente las grandes líneas históricas del relato artúrico.
Se hizo también una miniserie para la televisión basada en Las Nieblas de Avalon en el año 2001, cosechando un éxito modesto y con Anjelica Huston, Julianna Margulies y Joan Allen en los principales papeles protagonistas. Esta saga de libros fue ganadora del Premio Locus en 1984 y se divide en cuatro partes.
Tabla de contenidos
Nieblas de Avalon: Experta en magia
En el primer libro de serie asistimos a la infancia de Morgana, medio hermana del que sería el futuro Rey Arturo, a su posterior envío a Avalon de la mano de su tía, La Reina del Lago, Viviane quien habría de instruirla en los misterios druídicos. Una adulta Morgana se enamora de su primo Lanzarote, que a su vez es hijo de Viviana y ve como éste es raptado de amor por la joven princesa Ginebra, futura esposa del Rey Arturo.
Nada más empezar la voz de Morgana nos promete un viaje por la historia en donde nos explicará como ella se convirtió sucesivamente (aunque en una sola vida) en hermana, amante, enemiga y salvadora del que sería el rey Arturo.
Usando los distintos amores entre Ingraine y el Señor de Cornualles o Ingraine y Pendrágón (El padre del futuro Rey Arturo) la autora nos va sumergiendo lenta pero implacablemente, en el mundo tormentoso y a veces amargo de las Sacerdotisas de Avalon, cuyos sentimientos deben ser puestos en segundo plano en pos de realizaciones más trascendentales y siguiendo únicamente los deseos y condicionamientos de «La Gran Diosa» .
En este libro la presencia de Merlín es muy brumosa hasta la parte final, cuando nos presentan más detenidamente a Kevin quién se convertirá en pieza importante de toda la historia posterior.
Nieblas de Avalon: La Reina suprema
En el segundo libro de la saga , aunque Morgana sigue teniendo un papel protagónico , se nos introduce la figura de la hermosa y atormentada Ginebra quien aunque está irremediablemente enamorada de Lanzarote, debe terminar casándose con el Rey Arturo.
Por otra parte, en este segundo libro, Morgana ha dado a luz a su hijo con Arturo que ha dejado bajo el cuidado de su hermana, la ambiciosa y implacable Morgausse, esposa de Lot de un Reino del Norte, que decide quedarse con la criatura, para tener poder sobre el Rey.
En esta parte de la saga, Morgana se interna por primera vez en el mundo de las Hadas en donde cree pasar solamente unos días, que en el mundo real se traducen en diez años.
Arturo se muestra como un Rey bastante generoso y abierto, cuando al darse cuenta del amor de Ginebra por Lanzarote les propone realizar un trío para aliviar la culpa cristiana de Ginebra y que así esta pueda quedarse embarazada. A lo que Ginebra, perdidamente enamorada de Lanzarote, dice que sí.
Nieblas de Avalon: El Rey Ciervo
El rey Arturo, en el libro anterior ya había enfurecido a los habitantes de los Reinos Antiguos (a los cuales pertenecía Avalon) portando solamente el estandarte cristiano y marginando las antiguas creencias paganas que le habían otorgado Excalibur y lo habían llevado a gobernar.
Vibiane, la guardiana del Lago decide que ya es hora de que el Reino de Camelot pase a manos de el hijo de Arturo con Morgana, el malvado Gwydeon que fue criado por la egoísta y ambiciosa Morgausse.
En este tercer libro asistimos a la muerte de Viviana, decapitada por Balin, el hermano de su hijo Balan quien también muere luego de perseguir por toda Britania a Balin y darse muerte mutuamente. Morgana es reconocida como reina en el pueblo de las Hadas en Gales del norte. Y vemos el nombramiento de la nueva Dama del Lago y del nuevo mago Merlín.
Ginebra y Lanzarote profundizan su apasionado romance y Gwydion ahora se hace llamar Mordret (el concejero del mal) se afianza como un enemigo muy peligroso para el Rey Arturo.
Nieblas de Avalon: Prisionero en el roble
Arturo ha renegado totalmente de los antiguos dioses y su esposa Ginebra no ha podido darle un nuevo heredero, debido a la intervención mágica de la malvada Morgausse.
Morgana mientras tanto, casada con un Rey pero amante del hijo de este, decide que ya que Arturo no quiere devolver Excalibur ni dejar de ser cristiano debe morir para dejar paso a su hijo y heredero, el malvado Morgret. Arturo lucha con Sir Accolon (el amante de Morgana) y lo mata. Esta va a matarlo a su vez pero se da cuenta de lo mucho que lo quiere y no puede hacerlo.
Por otra parte, Morgret que ha sido desplazado como heredero legítimo por el hijo de Lanzarote, Galahad, para suceder al Rey, intriga con su madre adoptiva Morgrausse y ante toda la corte ponen en evidencia el romance de Ginebra y Lanzarote.
Merlín es acusado de traición en Avalon (por su apoyo al Rey Arturo ) y condenado a morir. Ginebra se refugia en un convento y en lucha feroz, Arturo mata a Mordret pero queda herido de muerte. Morgana lo lleva a Avalon en donde lo entierra. Lanzarote lanza a Excalibur al lago y ve como una mano la toma y la lleva al fondo.