Cada vez que hablamos acerca de los signos del Zodiaco, los enmarcamos dentro de unos parámetros generales que los definen, a veces, muy bien. Pero también, dentro de estas cualidades comunes a cada signo, existen asimismo varias escalas que van desde la más instintiva o primaria a la versión más evolucionada o mejorada del signo.
Para ser la mejor versión de uno mismo debemos ponernos a la altura de las circunstancias y eso significa potenciar o sacarle el mejor partido a nuestras capacidades naturales y, en ocasiones, ocurre que éstas permanecen dormidas u ocultas en nuestro interior, sin que logremos mostrar el verdadero diamante sin pulir que llevamos dentro. En este caso, destacamos a continuación cuáles son las cualidades que hacen de Aries ser su mejor versión en el amor.
Tabla de contenidos
La mejor versión de Aries en las relaciones
Dentro de una relación de pareja, Aries podría lograr que ésta fuese mejor, si mantuviese presentes unas cuantas consignas de conducta y alcanzase modificarlas un poco:
Ser menos impaciente y olvidarse del amor exprés.
Tiene que apagar ese reloj mental con el que quiere controlar el tiempo de todo, porque hasta cronometra la duración del amor. Ha de aprender a tomarse con más calma los ritmos naturales de las relaciones, olvidarse de los romances relámpagos e intentar no aburrirse antes de que llegue el clímax ideal para que se produzca el enamoramiento. Al no estar tan pendiente de que todo tiene su tiempo, conseguirá relajarse y aliviar sus tensiones internas, ayudándole a abrirse a los sentimientos y las emociones.
Guarda en su interior una gran reserva de amor y lealtad hacia su alma gemela.
Si, Aries cree en el amor para siempre y tiene fe en encontrar a su pareja ideal para prometerle amor eterno y entregárselo todo a ella. Pero, claro, hasta que la encuentra, se distrae jugando con pasiones pasajeras. Aries en su mejor versión de sí mismo, no reservaría tanto amor para una sola persona, por muy alma gemela que sea, sino que la compartiría sin medida con todos sus seres queridos. Esto haría de Aries un signo ejemplar y sería recordado por su gran capacidad de amar a los demás.
Cuando sabe madurar como el buen vino, se hace irresistible a los sentidos.
En la inteligencia de Aries, unida a esa manera tan espontánea y casi infantil que posee de afrontar la propia existencia, se concentra uno de sus mayores atractivos. Esta cualidad puede acentuarse con el pasar de los años y cuando es capaz de madurar como lo haría un buen vino y sabe aprovechar los desafíos y pruebas que va enfrentando a lo largo de su vida para aprender de ellos y sacarles el máximo partido, se convierte en un ser muy especial, capaz de traspasar las corazas que anidan en los corazones de los demás y con unas habilidades amatorias insuperables.
El filtro pasional de todo Aries es la energía y suele escapársele por la boca.
Se pondrá a tono fácilmente tras un poco de ejercicio, mediante un buen baile o una hora en el gym. Con tal fogosidad e ímpetu, unida a ese ingenio que tiene para crear las ideas más excitantes, es imposible que ningún idilio caiga en la rutina. A su lado, su pareja disfruta por el modo en que la hace reír, así como por el el atrevimiento de sus proposiciones más eróticas. Pero al igual que les sucede a los niños, cuando no canaliza debidamente esta energía y se aburre, le puede brotar de repente un carácter de mil demonios. Su lengua entonces se convierte en mordaz y su voz suave en gritos. Mejor idea siempre será salir a correr un rato, contar hasta mil o buscar algo que le divierta o entretenga, antes que provocar una pelea sin otro motivo que el de sortear el aburrimiento. Y aunque en seguida se le pasa el calentón, este fuerte carácter es un aspecto negativo que hace que el amor en sus relaciones, se vaya deteriorando antes de tiempo.
En el amor, Aries suele comportarse de manera controladora.
Le encantan los contrastes, pasar rápidamente del frío al calor, de la pura diversión de las cosquillas, las bromas y los juegos tontos al amor más profundo, desesperado e impulsivo, que le hace sentir en ese momento la persona más deseable del mundo entero. Pero sólo puede llegar al éxtasis del amor verdadero, si es lo bastante valiente como para liberarse de esa necesidad mental de ejercer el control. Cuando consigue entregarse al momento sin estar pensando en lo que tiene pendiente de hacer justo después, se verá recompensado mostrando la mejor versión de su amor por la otra persona.
Si te ha gustado esta publicación de Aries, te invitamos a que la compartas en tus redes sociales favoritas o nos dejes aquí tu comentario sobre lo que te ha parecido. Y ♥ No dejes de leer ahora: Cómo son las personas del signo de Aries