El tarot celta está basado en la antigua cultura celta, en las tradiciones irlandesas y sus dioses.
Los sacerdotes Druidas buscaron la conexión del individuo con la tierra, el cielo y el mar, para encontrar las respuestas y el crecimiento personal en la sabiduría. Según la tradición Celta los Druidas poseían la capacidad de ver ese camino con lo que podían predecir el futuro.
Las leyendas de los pueblos Celtas pertenecen a una etnia antigua con idioma y costumbres muy particulares y distintas al resto de las culturas del mundo. Estas leyendas han ido transmitiéndose, y transformándose, a lo largo del tiempo y aumentando su credibilidad ya que la cultura celta a través de sus predicciones nos ha dejado un gran legado de predicciones y advertencias.
Los celtas habitaron principalmente, en Irlanda, Gales y Escocia. Las únicas culturas celtas que sobrevivieron a las conquistas romanas, fueron las del sur de Inglaterra y Bretaña en Francia.
Entre ellos, los druidas eran un grupo intelectual, considerado como el más avanzado de todos los pueblos de la Europa antigua. Tenían una estrecha relación con los elementos de la naturaleza y apoyaban su oráculo en los tres reinos: mineral, animal y vegetal.
Se dice que fueron grandes videntes, brujos y profetas y además de predecir el futuro e interpretar a la naturaleza, se dedicaban a la astronomía y a la astrología, conocían el tamaño de la tierra y del universo, las estrellas y sus movimientos. Según las creencias fueron ellos quienes crearon el tarot celta inspirándose en la naturaleza y el conocimiento divino para elaborar las cartas de este tarot.
Este juego de cartas muestra un camino, que es el juego de la vida y cada una de las cartas encierra un secreto que será develado al consultante en el momento oportuno, cuando el cosmos decide responder, las cartas se dejan adivinar.
Como todos los
Oráculos puede ser usado en diversas situaciones, para ayudarnos frente a algún problema, para tratar de dilucidar cuál es la mejor forma de conducirnos antes de una determinada situación, como guía o como consuelo.
En la baraja del Tarot Celta, los arcanos mayores representan a los dioses, y en ellas aparecen el tradicional número romano así como el nombre del dios en gaélico. Por otra parte, los 22 arcanos se dividen en cinco ciclos, importantes para la cultura celta: mitológico, heroico, histórico, oceánico y aventurero.
La cultura Celta nos transporta a un mundo místico, de paisajes extraordinarios, increíbles héroes, hadas y duendes que forman este pueblo mágico que vive aun bajo las colinas de Irlanda. El horóscopo celta de los árboles es de los más conocidos horóscopos describe perfectamente la personalidad del consultante.
Curiosidades de su interpretación
El tarot Celta es muy particular y se cree que la persona que entra en contacto con el es por que directamente, la naturaleza tiene un mensaje claro para el en ese momento, aunque no sepa exactamente que significan las cartas.
Antiguamente solo podían acceder a las cartas de este tarot eran los Druidas, creadores del tarot y a su vez guías espirituales de la civilización.
Existían muchos dioses celtas con múltiples nombres. Las deidades masculinas solían estar asociadas con la tribu y el hogar, las deidades femeninas se asociaban a la tierra y los territorios. Para los celtas, la religión estaba vinculada a la magia. El objetivo de su religión era rogar favores a sus dioses o complacerles para evitar la furia divina.