Importantes escritores, ilustres alquimistas e intelectuales británicos, así como toda una pléyade de ocultistas de diversas partes de Europa se reunieron en el siglo XIX y a principios del XX en torno a una Sociedad Esotérica Secreta, conocida como la “Hermetic Order of the Golden Dawn” que traducida al castellano sería la Orden Hermética del Alba Dorada.
“Rosa roja, Rosa Altiva, triste Rosa perpetua de mis días! Acércate, mientras canto las antiguas tradiciones: Cuchulain en lucha con la implacable manera; El Druida, gris, hijo de los bosques el de la calma mirada, Que a Fergus, rodeo de sueños, e indecible ruina… “
Así cantaba el famoso escritor irlandés y premio Nobel Willian B. Yeats a la rosa, un símbolo por el que sentía especial predilección y que, junto con la cruz, conformaban dos símbolos que habían sido utilizados por los rosacruces medievales y que luego esta Orden Secreta retomaría posteriormente, de la que Yeats seria uno de sus representantes y miembros célebres.
Gracias a esta sociedad mística, la mas famosa de todas las surgidas en Inglaterra a finales del siglo XIX, Yeats se familiarizó con la cábala, la astrología, el Tarot, la tradición hermética, el mundo de los símbolos y la magia presentes en toda su obra, pero no sería el único miembro célebre de esta conocida Orden, fundada en Londres en 1888.
Origen de la Orden Alba Dorada
La Sociedad Rosacruz de Inglaterra era un pequeño círculo formado por los masones aficionados al Ocultismo. El Dr. Westcott, Macgregor Mathers y el Dr. Woodman eran sobresalientes integrantes de una de las Ordenes Herméticas más conocidas por aquel entonces, a mediados del siglo XIX. Esta Sociedad previa fue fundada por Robert Wentworth Little, un gran estudioso de las obras de Eliphas Levi, el famoso ocultista y alquimista francés. También fue tendencia muchas otras Órdenes Heméticas como la Sociedad Teosófica de Madame Blavatsky.
Más tarde, en 1888, los tres sobresalientes miembros de aquella Orden: Woodman, Westcott y MacGregor Mathers, fundaron el primer templo en Londres de la Orden Hermetica del Alba Dorada y empezó a circular el siguiente documento entre los iniciados rosacruces, llamado “Instrucción Histórica para los Neófitos”, con la única intención de llamarlos para que formaran parte de la nueva Orden y que decía lo siguiente:
“La Orden del Alba Dorada en el Exterior es una Sociedad Hermética, a cuyos integrantes se les enseñan los principios de la Ciencia Oculta y de la Magia. Durante la primera parte de la segunda mitad de este siglo, varios Adeptos y Jefes eminentes de la Orden, en Francia y en Inglaterra, fallecieron, y sus muertes causaron un estado temporario de sueño del Trabajo del Templo. Entre los destacados Adeptos de nuestra Orden, y de público renombre, estuvieron:
- Eliphas Lévi, el más grande de los Magos modernos de Francia.
- Ragon, el autor de varios libros clásicos del saber oculto.
- Kenneth Mackenzie, el autor de la famosa y erudita “Enciclopedia Masónica”.
- Frederick Hockley, dueño de fina visión en el cristal, y cuyos manuscritos fueron muy estimados.
Estos y otros Adeptos contemporáneos de esta Orden, recibieron su conocimiento y poder de predecesores de igual y aún mayor eminencia. Realmente, ellos recibieron y nos legaron esta doctrina y este sistema de Teosofía y Ciencia Hermética, y la Alquimia suprema de una larga serie de investigadores prácticos, cuyo origen se remonta a los “Fratres Rosae+Crucis de Alemania”, asociación que fue fundada por Christian Rosenkreuz, hacia el año 1.398.”
¿Era la Orden del Alba Dorada un fraude?
De acuerdo a la tradición, William Wynn Westcott, uno de sus fundadores, encontró un manuscrito codificado que contenía los rituales de iniciación necesarios e instrucciones para ponerse en contacto con una Logia Rosacruz de origen alemán, dirigida por una ocultista llamada Ana Sprengel. Esto llevó a la creación de la Orden, a la que se le dio el nombre inicialmente de «Templo Isis-Urania».
Dicho manuscrito constaba de unas sesenta hojas. La única copia del texto que se conoce formaba parte de la colección privada de Arthur E. Waite, uno de los creadores del Tarot de Rider Waite el cual entró a formar parte de la Orden en 1891. Sin embargo, se cuenta que este relato es simbólico y se utilizó para velar la identidad de los verdaderos Maestros que transmitieron el linaje a la Orden Iniciática y sostiene que su linaje puede trazarse hasta la Orden Rosacruz de Oro Alemana.
Sin embargo la existencia real del manuscrito, conocido como el Soror Sapiens Dominabitur Astris (El sabio será dominado por los astros), es bastante dudosa. Algunas investigaciones de las cartas de la Srta. Sprengel, desprenden que el alemán que usa es poco profundo, como si estuviese escrito por un estudiante de alemán. Por lo que todo parece indicar que Westcott falsificó los documentos con el fin de hacer creer que la Golden Dawn derivaba su autoridad y prestigio de un enigmático origen alemán. Parece que la ocultista rosacruz Ana Sprengel, también fue un personaje creado por Westcott.