Los prejuicios son creencias limitantes que emitimos antes de conocer algo o alguien. Unos juicios de valor que condicionan nuestro comportamiento y que, queramos o no, están presentes desde muy temprana edad.
Leonardo Da Vinci Nada nos engaña tanto como nuestro propio juicio .
Este hombre del renacimiento tenía muy claro lo que suponía dejarse guiar por las apariencias. La imagen que tenemos suya y que representa un modelo que consideramos correcto, difícilmente se borra.
Algunos signos intentarán deshacerse de estas ideas preconcebidas , aunque todos y cada uno de ellos, las tendrá muy interiorizadas en estos aspectos clave.
Hay unos prejuicios que Aries hace de forma automática. No importa que no haya intercambiado palabra, para este signo es muy importante analizar cada gesto de la persona que ve delante.
Si no le miran a los ojos es un signo de debilidad y de falsedad. Dos duras premisas que asume de forma automática.
Tauro proyecta cada uno de sus miedos en la persona que acaba de conocer. El efecto espejo se identifica en sus prejuicios. Puede realizar un juicio por solo la forma de vestir, viendo si usa ropa de marca o no.
La sencillez le hará pensar que esa persona sufre problemas financieros, algo que debería dejar a un lado. Lo material no siempre es lo importante.
Antes de conocer a alguien Géminis normalmente no emite unos prejuicios muy claros. Lo hace de forma sutil, este signo prefiere conocer a la persona antes de decir algo sobre ella.
No en vano es uno de los más sociables. Aún así, se le pueden escapar algunos elementos al comprobar que no le siguen el ritmo. Juzgará a los que no le reciban bien.
Cáncer es un gran amante de los gestos. Los prejuicios que emitirá generalmente serán como consecuencia de determinadas señales que no terminan de salir bien.
No dar un abrazo correctamente o besar de lejos sin tocar a la mejilla son gestos que le molestan. Se sentirá abandonado y mostrará un entrecejo de enfado de forma automática.
El signo de Leo es muy crítico con aquellos que no siguen sus normas. No podrá evitar juzgar a alguien que va por libre.
Aunque en el fondo esta libertad le dará mucho de qué pensar, es un ser atado a una serie de compromisos de los que no puede separarse por nada. Si alguien se sienta solo en un rincón, le hará sospechar y lo juzgará.
Virgo es un experto en prejuicios. Su inteligencia le lleva muchas veces a establecer conexiones o juicios antes que nadie. Se centrará en dar una imagen a un conjunto que podría acabar siendo un error.
Establece puntos de conexión y los justifica, pero eso no quiere decir que sean totalmente ciertos. Le costará dejarlos a un lado.
Prejuzgar a las personas no entra dentro de los planes de Libra. Dará una oportunidad a todos y cada uno de los que quieran acercarse a él, pero con ciertas condiciones.
No tolerará a aquellas personas que hablen fuerte o que intenten imponer sus ideas, para este signo, la falta de educación se percibe con solo unos gestos o palabras.
El rey de los prejuicios injustificados intenta justificarlos a través de su sexto sentido. Las historias que van creciendo en su mente para darle cabida a eso que piensa de una persona que ni conoce, son cada vez mayores.
Le costará romperlos, a menos que quiera conocer en más profundidad, será imposible eliminar esa imagen preconcebida.
Sagitario conoce bien el significado de los prejuicios. Ha vivido casi toda la vida una serie de críticas injustificadas que le han acabado forjando ese carácter auténtico.
No se guiará por las apariencias, pero sí por la forma de actuar. Es una persona que se enfrenta directamente con aquellos que intentan criticar de forma desmesura, eso será un punto negativo para él.
Aunque diga que no, Capricornio es un especialista en prejuzgar a las personas. Detrás de una imagen en la que intenta quedar bien con todo el mundo hay un ojo crítico que se mueve de forma involuntaria.
Este signo mirará directamente hacia aquellos puntos débiles de la persona que tiene delante, esa mancha en la ropa le hará sacar conclusiones precipitadas.
El signo de Acuario no suele prejuzgar, de hecho, sería uno de los que no lo hagan. Aunque siempre hay excepciones y alguno de sus nativos puede dejarse llevar por las apariencias.
La ostentación o el poder pueden hacerle pensar que se trata de una persona prepotente sin conocerla, emitirá un juicio directo.
Piscis es un experto en evitar los prejuicios de todas las formas posibles. Quiere creer en la bondad de las personas, aunque en determinadas ocasiones esta idea desaparece.
Cuando ve a alguien que se ríe de otra persona o que hace bromas de mal gusto, considera que se trata de una mala persona, sin conocerla.
