Los consejos, como todo lo que se basa en la interrelación entre seres humanos, implica a veces el encuentro de dos extremos totalmente opuestos.
Porque un consejo no es más que la opinión diferente de alguien sobre cómo debemos proceder ante una determinada situación.
El ideal de un consejo sería una orientación dada con la mejor intención para ayudar a alguien a resolver una situación. Una opinión dada desde el amor, la empatía y la comprensión siempre es un buen regalo que podemos otorgarle a nuestros seres queridos.
Sin embargo, hay gente que da consejos que nadie les está pidiendo. Hay gente que da consejos inútiles y hasta peligrosos. Y hay gente que da muchos consejos que no es capaz de aplicarse a sí mismo.
Y claro, esto es la mayoría, porque dar un consejo es hacer una enunciación y hay demasiada gente que habla por hablar.
Y, no solamente no oyen bien la situación sobre la que están aconsejando, ni la comprenden y, muchísimo menos, son conscientes que, en realidad es a ellos mismos (y solo a ellos porque solamente se miran el ombligo) a quienes hacen falta esas cosas que tan alegremente aconsejan a los demás.
Veamos a cinco signos que pueden caer fácilmente en dar consejos que son incapaces de aplicarse.
Tabla de contenidos
1. Leo, los consejos paternales
El magnífico signo del león no está en este lugar porque sea un simple papanatas al que le guste estar hablando de todo y aconsejando a quien no se lo pide, ni mucho menos porque no sea capaz de seguir al pie de la letra los consejos que da a los demás.
Después de todo, Leo es el signo de los padres y los profesores y es inevitable que quiera aconsejar a los que tiene cerca. Le encanta dar consejos, para que lo vamos a negar.
¿Qué es lo que no aplica para sí mismo Leo quien tan alegremente se divierte dando consejos? Pues precisamente eso, recibir consejos, le molesta de una forma tan insólita que uno no se la explica.
Sagitario, el consejero filosófo
Los consejos, si vienen de alguien inteligente, son tesoros que hacen a una persona muy valiosa para sus semejantes. Alguien capaz de dar buenos consejos es alguien muy apreciado por su círculo íntimo.
La mayoría de las personas del signo del centauro tienen una forma de mirar la vida muy filosófica y les gusta reflexionar sobre cosas como la religión, el bien, el mal y casi todo lo espiritual o terrestre.
Y claro, alguien que descubre tantas cosas leyendo, estudiando o viajando es inevitable que quiera compartirlas.
Y sí, hay que admitir que Sagitario es experta en dar consejos que no sigue, pero eso porque no los necesita, porque es capaz de pensar en lo que necesita la persona que le pide el consejo.
Géminis, consejos vendo …
Todos sabemos que a Géminis le encanta hablar e intercambiar ideas y opiniones. Eso es típico del elemento aire que le rige.
Y Géminis como es inteligente, si está bien aspectado puede ser una joya de consejos aplicados a sí mismo.
Pero también puede ponerse demasiado necio (por hablar demasiado) para dar consejos que nadie le está pidiendo y además, no darse cuenta que carece de autoridad necesaria para darlos.
Ese es un peligro que tiene ese gusto por la comunicación de Géminis, que como todo, se va al extremo inútil.
Libra, consejos de ida y de vuelta
La necesidad de justicia y la continua reflexión que hace sobre las relaciones y la comunicación este signo del zodíaco, le hacen un excelente consejero, ya que como buen signo de aire, le da bastante vueltas a todo y busca continuamente explicaciones de las situaciones por las que atraviesa.
Y como a Géminis, también le encanta hablar, porque así se comprende a sí mismo, y también, cuando necesita saber qué decisión tomar se ayuda dándole consejo a los demás.
Luego que los siga al momento es más difícil, pero también hay que decir, que luego de superada su inevitable indecisión, cuando Libra da un consejo, es porque está dispuesto a seguirlo también (aunque quizá no tan rápido como debería).
Piscis, ponerse en el lugar del otro
Aquí sí vemos una muestra de cómo el hecho de dar consejos puede ser una gran muestra de amor y hasta de sacrificio por los demás.
Piscis es tan empático que cuando alguien le cuenta un problema lo siente como si le estuviera pasando a el mismo y trata de resolverlo de todas las formas posibles.
El problema es que, a veces, se involucra tanto con los demás, que se olvida de resolver sus propios asuntos. Y claro, aunque no lo hace por mal, esta actitud es bastante poco inteligente para su autopreservación.