Piscis es un signo de agua, que rige los mares profundos, lo que explica su gran sensibilidad. A veces, su capacidad de evasión es tal, que es como si se sumergieran en un submarino a gran profundidad. Esto les dota de de un aura difícil de olvidar.
El carisma es uno de los puntos de conexión más importantes a nivel social y en una red de amistades. Y el de Piscis es digno de alguien que está siempre dispuesto a abrir su corazón.
Si quieres conocer a qué enfrentarte, conoce de primera mano los rasgos que hacen brillar a todo Piscis.
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Sabe fluir con la vida
Las características positivas de un signo se desprenden precisamente de sus cualidades, es decir, los puntos en donde un signo debe trabajar su potencial y evolucionar, sacando a la luz su lado más brillante.
La representación de Piscis por dos peces nadando en direcciones opuestas nos indica que es un signo con una gran habilidad para fluir y nadar a contracorriente si fuera necesario.
Nada mejor para empezar el día que un poco de humor. Una sonrisa suya valdrá millones. Es algo realmente terapéutico para él, una energía distinta empieza a moverse en su interior. Y le encantan las personas que siguen esa línea.
Piscis es un signo entrañable
Piscis tiene un sentido del humor inocente y algo infantil. Puede llegar a reírse de los demás, pero siempre desde un contexto sano. Sus bromas pueden ser de lo más simples y tiernas.
Eso de quitar la silla de la mesa sin que se den cuenta o cambia el azúcar por la sal son un clásico en su repertorio. Es tan inocente que casi siempre le pillan antes de que se produzca la broma. Como un niño, se pondrá rojo y no parará de reírse solo.
Los chistes un poco subidos de tono será mejor guardarlos para más adelante, si acabas de conocer a un Piscis no le lances la caballería. Es un poco tímido y determinados chistes le puede poner en un compromiso.
En la mente de un signo como Piscis los pensamientos cómicos se repiten más a menudo de lo que parece. Necesita un ambiente relajado para poder sentirse bien y mejorar en gran medida su humor.
Tiene una actitud variable
Piscis, por desgracia, suele dejarse llevar demasiado a menudo por las reacciones del ambiente. Cuando todo son risas y buen rollo a su alrededor, quiere más y más de lo mismo, pero cuando hay tensión o conflicto, se ve arrastrado irremediablemente por la corriente.
Hará lo que diga la energía que le rodea. En cualquier caso, debe intentar ser todo lo realista posible para no perderse en ese universo de fantasía que tiene. Será mejor crear un refugio positivo, un escudo de buenas vibraciones que le protejan.
La imaginación de Piscis es contagiosa
Neptuno, su planeta regente, tiene una fascinación natural por todo lo mágico y lo ilusorio, facilitando a sus nativos estados alterados de conciencia en los que es más factible que ocurran los «milagros».
Sin embargo, esa cualidad no es producto de la casualidad ni del ocio, sino que es todo un proceso espiritual del propio signo, que lo sabe transmitir al resto de forma incondicional.
Con Piscis, las segundas intenciones, no funcionan. Nunca las pilla del todo. Por eso, es mejor ser realista y directo con este signo, antes de que su imaginación haga de las suyas.