La piedra angular de una construcción es la que define toda la estructura de la misma. Por eso, cuando hablamos de la piedra angular de cada signo, nos referimos a ese valor base que construye toda la estructura de su personalidad según la Astrología.
Tabla de contenidos
Aries:
Al ser Aries el primer signo cardinal (y el primer signo del zodíaco) su piedra angular se ubica precisamente en su YO, su ego pero no entendido este de manera negativa sino la enorme fuerza que le da a Aries su certeza en sí mismo, su energía y su vitalidad. Aries es como el niño del zodíaco y eso le da una pureza y una fuerza muy particular.
Tauro:
Lo que sostiene el edificio psicológico de Tauro son sus valores, esas cosas no materiales en las que cree. Su elemento tierra y el hecho de estar regido por Venus hace que Tauro pretenda construir obras materiales sobre estas bases, es por eso que este signo genera tantos artistas, pero la capacidad de materializar sus valores en obras hermosas se aplica a cualquier aspecto de la vida.
La piedra angular de Géminis:
Las capacidad verbal de Géminis es la piedra angular de su enorme inteligencia y capacidad de observación que son las características que mejor le definen. Géminis posee un espíritu inquieto y siempre trata de ponerse en distintos puntos a la hora de abordar cualquier cosa lo que le da una visión muy completa de las situaciones.
Cáncer:
La compasión entendida como una gran empatía y capacidad para “sentir” a los demás conforman la piedra angular de la personalidad de Cáncer. Este signo cardinal regido por la Luna da gran importancia al hogar y a la familia.
Leo:
Su alegría de vivir que es la piedra angular de su enorme talento creativo constituyen la base psicológica del temperamento de Leo. El elemento fuego y el creativo sol como regente hacen que este signo brille, pero que su energía (como la del sol) nutra a quienes están a su alrededor.
La piedra angular de Virgo:
Se le acusa de ser muy crítico, pero es que la piedra angular de la personalidad de Virgo se encuentra en su capacidad de servir a los demás y en su necesidad de que las cosas tengan un “orden” determinado. Lo que se conoce como el talante de servicio de Virgo es también su capacidad de ordenar las cosas sencillas y cotidianas de la vida.
Libra:
El centro o piedra angular de la balanza es precisamente lo que busca Libra, es decir, el equilibrio, es por eso que se le asocia con la justicia que es precisamente tratar de que los lados de la balanza se encuentren en igualdad de condiciones.
Escorpio:
La piedra angular de Escorpio es su capacidad de encontrar en lo más oscuro y en los más profundo lo más brillante y lo más valioso, “desenterrar” es por eso que Plutón (el regente de Escorpio) domina el inframundo pero también el el dios de la riqueza , por esas piedras preciosas o minerales que se encuentran debajo de la tierra.
La piedra angular de Sagitario:
La base del temperamento de Sagitario tiene que ver con las búsqueda espiritual de cosas superiores, es por eso que Sagitario mira siempre más allá, como el arquero que lanza su flecha al infinito. Esto le dota de una enorme curiosidad y de una enorme grandeza de miras.
Capricornio:
Se puede decir que es el signo más sólido que encontramos en el Zodiaco, por lo que la base en la que se sustenta toda su estructura personal se cimenta en unos sólidos (y, a veces, rigidos) valores y creencias que los dotan de unos comportamientos ejemplares de cara al resto. Su madurez le viene de fábrica, y a medida que pasa el tiempo, va ganando terreno en ese sentido.
Acuario:
Su solidaridad y el amor por la humanidad, su capacidad de ver mucho más allá que sus contemporáneos constituyen la piedra angular de la incomprendida personalidad Acuariana, incomprendida solo por eso, porque está demasiado adelantada a su tiempo.
Piscis:
Su enorme compasión y su sensibilidad basada en la experiencia kármica de muchas vidas conforman la piedra angular del temperamento de Piscis, el signo más artístico y místico del zodíaco. Piscis tiene la capacidad de explorar las profundidades del alma humana que no tiene ningún otro signo del zodíaco.