En muchas ocasiones el Feng Shui es tratado despectivamente. Algunas personas, relacionan el Feng Shui con un simple y banal folclore oriental que ha adquirido determinada fama con los años. El Feng Shui es algo más que un simple conjunto de intuiciones, algo más que magia. Además, no se puede relacionar con ninguna doctrina religiosa, pero sí con una serie de principios místicos como el tao. Igualmente, en cierta manera, también se puede decir que es una ciencia, ya que sus reglas están basadas en un sistema de observaciones y datos estadísticos obtenidos a lo largo de los años.
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FUNDAMENTOS DEL FENG SHUI
La base científica del Feng Shui se puede encontrar en las matemáticas, en la física, en la astrología, etc… El Feng Shui es una poderosa herramienta para proteger y mejorar la energía vital que circula dentro de una persona y en su espacio inmediato. La ciencia del Feng Shui no es más que un decodificador del sistema energético que envuelve a un individuo y que le dota de herramientas que le van a permitir vivir en armonía.
¿PARA QUÉ SE UTILIZA EL FENG SHUI?
El Feng Shui tiene muchas utilidades. Quizás la más conocida por todos sea su finalidad para diseñar casas con un ambiente agradable, con un ambiente armónico. De forma general, las leyes del Feng Shui se utilizan para distinguir qué zonas de una casa puede ser favorables o desfavorables, y a partir de ahí, decorar la casa en función del modo del vida del propietario de la misma. Sin embargo, su uso no se debe limitar al hogar. También se puede utilizar para elegir la ropa que mejor combine energéticamente con una persona, etc…
EN DEFINITIVA EL FENG SHUI…
En conclusión, el Feng Shui no es más que compartir un cierto sentimiento de armonía y aprecio con respecto al entorno que rodea a las personas. Vivir en sintonía con el entorno hace que las energías fluyan a través del universo y de los individuos sin obstáculos. Es un modo de vida, un modo de vivir en paz, y además, es gratis.